Un ejercicio físico adecuado
puede ayudarnos a restablecer el equilibrio entre el cuerpo y la mente.-
El
estrés psíquico se concentra en nuestro aparato locomotor, entre otras causas,
por posturas y esfuerzo incorrectos y por falta de ejercicio físico.- Esto es
lo que nos aboca a tensiones o dolores en las articulaciones que trastornan
nuestra estructura corporal y, como consecuencia, producen dolores de espalda.-
Con
el estrés y dolores musculares, el ser humano puede ver perturbada su armonía,
al perder el equilibrio y alterarse su salud.- Si el aparato locomotor se ve afectado, se pueden producir
dolores de espalda, dolores de cabeza (por la tensión acumulada) y dolores en
cuello y hombros.-
Una
postura erguida, elegante, natural…… requiere de esfuerzo para mantenerla porque nuestro aparato locomotor se
encuentra desequilibrado, débil y tenso.-
Una persona contraída es una persona encorvada.-
Es
importante la observación que nos prestemos a nosotros mismos cuando notamos
estrés y percibamos sus molestias.- Debemos reflexionar sobre la relación de
las molestias en la vida cotidiana, personal o profesional.-
Cuando
el lunes, sintamos dolores de espalda preguntémonos qué hicimos el fin de
semana.- La localización del dolor nos dará la respuesta.- Seguramente habremos cargado un peso
excesivo o asumido un trabajo o responsabilidad más allá de nuestro límite.-
Advertir a tiempo estos riesgos es
fundamental para nuestra salud.- Debemos mentalizarnos y tomar medidas.-
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