El ejercicio físico es un
tratamiento moderadamente efectivo y sobre todo, preventivo ante el dolor
lumbar.-
Los
ejercicios con control motor se han mostrado como unos de los más
eficaces.- Estos ejercicios actúan
sobre los músculos y ligamentos más profundos del cuerpo, a medida que nos
ejercitamos con ellos.- Este punto se alcanza con la práctica constante,
adquiriendo coordinación motora.-
Las mejorías adquiridas son las que consiguen el cambio positivo en la calidad de vida.-
Una
noticia que llama la atención es que el 54 % de los pacientes con artrosis no
realiza ninguna actividad física y lo que es más grave: muchas personas, cuando
les comunican que sus dolores musculares son debidos a la artrosis, dejan de
hacer el poco ejercicio que hacían.-
Es muy corriente oír decir: “ No puedo hacer ejercicio porque tengo
artrosis”.- Craso error.-
Las
recomendaciones del futuro, pasan por concienciar a la población de que la prevención con actividad física es un tratamiento muy eficaz.-
Un
programa intenso de dos veces por semana, siempre que la persona lo complete con
otro tipo de actividad física
realizada por su cuenta y, unido a unas correctas pautas de alimentación, sería muy aconsejable.-
Todo
esto implica un esfuerzo por nuestra parte que, no siempre, estamos dispuestos
a realizar.-